La formación para clientes en la implementación exitosa de un proyecto de Salesforce comienza desde el momento inicial del proyecto, antes de realizar el primer workshop, y no debería ser un mero hito que alcanzar antes de la finalización del proyecto. Sin embargo, antes de continuar, echemos un vistazo a las definiciones de formación y formar:
Formación: Del latín formatio, -ōnis.
- Es la acción y efecto de formar o formarse.
Formar: Del latín formāre. Tiene diferentes acepciones en la RAE, de las que destacamos las siguientes:
- Dar forma a algo.
- Hacer que algo empiece a existir. Por ejemplo: El viento forma dunas en la costa.
- Juntar y congregar personas o cosas, uniéndolas entre sí para que hagan aquellas un cuerpo y estas un todo.
- Dicho de dos o más personas o cosas: Hacer o componer el todo del cual son partes.
- Preparar intelectual, moral o profesionalmente a una persona o a un grupo de personas.
- Dicho de una persona: Adquirir preparación intelectual, moral o profesional.
Sea cual sea la definición escogida, la realidad es que una buena formación Salesforce para clientes puede marcar la diferencia entre una adopción exitosa o un fracaso estrepitoso. Queremos que el cliente se sienta cómodo con la implementación realizada y que aprecie el valor añadido que Salesforce le ofrece, así como el valor añadido de S4G como partner de la implementación.
Recomendaciones para formaciones Salesforce para clientes
A continuación, ofrezco una serie de recomendaciones sobre cómo enfocar la formación, todas ellas basadas en mi experiencia.
¿Cuándo arrancar la formación?
Las formaciones Salesforce para clientes deben comenzar antes del primer workshop. Debemos recordar que para muchos de nuestros clientes este va a ser su primer proyecto de Salesforce y, como bien sabemos, todo lo nuevo provoca cierto temor. Realicemos una primera sesión en donde le expongamos al cliente qué es un CRM como Salesforce, cuáles son los términos (o la jerga) que usaremos a lo largo del proyecto y cómo una implementación (out-of-the-box) le puede ayudar a mejorar en sus procesos de negocio.
¿Hay que mostrar los avances del proyecto?
Mostremos con frecuencia los avances de la implementación. Es importante que el cliente vea cómo va quedando la funcionalidad, cómo va a cambiar su manera de trabajar y el impacto positivo que la plataforma va a traer al negocio. Estas reuniones pueden hacerse cada dos o tres semanas, y en cada una de ellas podemos ir mostrando cómo encajan las piezas del “puzle”. El objetivo de estas reuniones es, sencillamente, que al final los usuarios no se lleven una “sorpresa negativa”. Adicionalmente, queremos que los usuarios se sientan partícipes de lo que se está construyendo.
También debemos mostrar el encaje de todas las piezas. Una vez concluida la fase de implementación, es muy recomendable realizar una sesión para ver los flujos de negocio de extremo a extremo. El cliente debe poder visualizar el valor agregado en la nueva forma de trabajo y cómo va a obtener beneficios a corto, medio y largo plazo.
¿Cómo debe ser el material que se entrega a los clientes?
Generemos una documentación que sea fácil de leer y que vaya al grano. Después de todas las sesiones en donde hemos ido enseñando al cliente el valor de la implementación, debemos proporcionarle documentación que le sirva como referencia a los usuarios actuales y futuros de la herramienta. Debe usarse un lenguaje sencillo y tratar de combinar diferentes tipos de materiales, como vídeos cortos, animaciones, imágenes, etc.
La formación no es un punto que podamos menospreciar, y su valor debe mostrarse desde el comienzo del proyecto hasta la finalización de este. Por ello, si estás pensando en incorporar soluciones Salesforce a tu negocio pero tienes dudas sobre cómo formar a tus equipos, desde S4G podemos ayudarte a que el aterrizaje de las soluciones sea óptimo y la adopción del proyecto lo más rápida posible. Si tienes cualquier duda, contacta con nosotros.
